miércoles, 6 de junio de 2012

Recortes finlandeses

Edith Södergran 

Buscabas una flor 
y encontraste un fruto. 
Buscabas una fuente 
y encotraste un mar. 
Buscabas una mujer 
y encontraste un alma; 
estás decepcionado. 


ooo
Lars Huldén 

Abruptamente entro 

Abruptamente entro 
en el solemne salón de la lírica. 

Allí están los poetas 
escuchando música 
en torno al muerto. 

¡Qué manera de comportarme! 
Algunos señalan mi gorra 
otros las botas. 
Lo único que me queda es disparar 
una perdigonada a la araña de cristal.
 

                                                                     000
Me preguntan, no inesperadamente 

Me preguntan, no inesperadamente 
por qué escribo. 
Sé lo que debería contestar: 
Escribo porque amo 
a la humanidad y quiero 
que mejore la situación de los hombres y que puedan vivir juntos 
en paz, libertad e igualdad. 
Con mis poemas quiero en la medida 
de mi escaso talento, contribuir a alcanzar 
esa noble meta. 

Pero contestar de esa manera 
sería pura palabrería. 

Escribir es hundir la mano 
en tinta, en alquitrán o en tinta de imprenta 
y estamparla en una pared 
por amor a la impresión, 

por el sólo motivo de la impresión 
de su mano. 

Lo más negro que hay 
donde hundir la mano 
es la miseria del mundo.
 


                                                       000


Zona privada
Perdonar porque uno olvida
sucede como en la naturaleza
donde hasta la rama más espinosa muere,
olvidar porque uno perdona
sucede en el territorio de dios
al que pocos tienen acceso.

¿Qué cavas?
¿Qué cavas
en los rostros de esos hombres?
¿Acaso no están ya suficientemente excavados?
Una excavación
no implica necesariamente una profundización.
Y si tú en uno de esos rostros atormentados
encuentras finalmente un diamante
¿habrás redimido a la humanidad?
¿le habrás dado una imagen más luminosa de mundo?
La llama que perfora el acero
no por ello nos proporciona una luz más duradera.
El agua que ha horadado la roca
ya se ha secado en su surco.


[Si al hombre…]
Si al hombre no se le molesta,
si no se le ha molestado,
elige bien,
siempre.
Si al hombre se le molesta,
si se le ha molestado,
elige mal
y se altera.
O bien. O
se abstiene de elegir.
Un hombre alterado
es como un nido abandonado.
Alguien se ha acercado sin cuidado.
Ha molestado al nido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario